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Opinión sobre la novela

jueves, 4 de octubre de 2012

Capítulo 17.


Yo corría y corría por las tinieblas pero por más que lo hacía sentía como aquella sombra negra estaba a punto de alcanzarme. Hasta que al final del bosque había un terrible abismo sin fin. Me detuve cerca  de la punta de una roca al final del camino, en dirección al abismo, allí se encontraba mi hermana con una mirada totalmente perdida.  La sombra negra me acechaba. Se acercaba más y más y yo caminaba en dirección a Diana. Por momentos tenía la sensación de que se caería al vacío. Hasta que de repente, aquel espectro me dejó a un lado. Parecía que mi hermana era ahora su objetivo. De  un solo toque aquella sombra la empujó y sin más remedio, cayó.
-          ¡No! –grité al despertarme de la terrible pesadilla. Estaba sudando bastante y, al parecer, Harry se había despertado por mi grito.
-          ¿Qué pasa? –preguntó preocupado al verme agitada. No pude evitar comenzar a llorar. –No llores, ¿has tenido una pesadilla?
-          S…sí… Di…Diana… Yo… y… –Los sollozos no me dejaban pronunciar palabra. –Había u… una sombra y…y un abis…bismo.
-           Ssh… Tranquila… Ven aquí. –apoyé mi cabeza en su pecho hasta que conseguí calmarme, entonces me preguntó qué era lo que había soñado.
-          Una sombra, me perseguía. Pero luego se fijó en ella, Diana. Y la empujó… y se cayó. –estaba temblando.
-          Ya pasó, solo ha sido un mal sueño…
-          Parecía tan real… ¿qué hora es?
-          Las seis. –dijo observando su reloj. –Se me ha ido el sueño.
-          A mí también. Mi tía debe estar por levantarse ¡Harry!
-          ¿¡Qué!? –exclamó asustado.
-          ¿Qué haces en ropa interior? ¡Tápate! –él rió. -¡Ssh! Cállate. Si mi tía te ve me mata.
-          Bueno, relájate. Se me ha olvidado que estaba en tu casa. –de repente oímos la voz de mi tía.
-          ______, ¿estás despierta?
-          Dios mío –pensé- Rápido Harry, ve a cambiarte al baño.
-          ¿______? –volvió a decir mi tía.
-          ¡Sí, ya estoy despierta! –observé como mi tía se acercaba hacia mí. Menos mal que Harry ya se había ido.
-          Cariño, necesito hablar contigo.
-          Claro tía. Dime.
-          Verás, anoche hablé con tu madre sobre lo de Diana. Me ha dicho que está muy preocupada por ti, no quiere que pienses cosas que no son.
-          Pero… ella no quiere venir, Diana la necesita.
-          Lo sé, como también sé que tu madre tiene sus razones. En este momento no te puedo decir cuáles son, pero tengo que comunicarte algo muy importante.
-          Que… -dije alentándola.
-          Tu madre está en este momento en Nueva York. Ella quiere que trasladen a Diana a una clínica de allí. –Mis ojos se abrieron como platos. –Será lo mejor, ______. Ya lo hemos discutido, no hay marcha atrás.
-          Pe…pero… ¡No puede ser! ¡¿Tú también estás en mi contra!? –estaba furiosa. No podía permitir que se llevaran a mi hermana. No…
-          Nadie está en tu contra- dijo ella calmada, pero a la vez muy seria. –Allí tu hermana estará mucho mejor, hay médicos más especializados y quizás se recupere más rápido. –no podía competir contra aquellos argumentos. Si Diana estaba mejor allí tendría que aceptarlo.
-          Nueva York está muy lejos… ¿Y si le pasa algo? No estaré allí para despedirme de ella, no quiero que se la lleven tía… -una lagrima resbaló por mi mejilla.
-          Te aseguro que la volverás a ver, cariño. Confía en mí. –me dedicó una sonrisa y luego nos abrazamos.
-          ¿Cuándo se va?
-          Mañana por la mañana. Daros prisa, si tú y tus amigos queréis verla, tendrá que ser hoy.
-          Muy bien. Llamaré a los demás.
-          ¡Oh! Se me olvidaba decirte que yo acompañaré a tu hermana durante el traslado y me quedaré una semana por allí. Hace mucho que no veo a tu madre, ¿de acuerdo?
-          Sí… -Mi tía se vistió para ir al hospital antes que nosotros, ya que luego tendría que irse a trabajar. Así era ella, siempre tan ocupada.
Harry salió del baño justo en el momento en el que mi tía se fue.
-          ¿Por qué has tardado tanto? Tenemos que hablar…
-          Estos rizos no se peina solos, cariño… Oh no, no será lo que yo pienso… por favor, no he hecho nada. No te engañaría con nadie ¡ni siquiera me ha dado tiempo de conocer a nadie más hoy! No me dejes – Suplicó. Yo miré a Harry confundida y luego solté una carcajada.
-          No te voy a dejar. Es sobre otra cosa… quieren trasladar a Diana a otro hospital, en Nueva York.
-          ¿¡Qué!? –exclamó -¿Cuándo?
-          Mañana, debemos ir hoy a pasar el día con ella. ¿podrías avisar a los chicos?
-          Claro, princesa. -¿princesa? Nunca, en mi corta vida, me habían llamado así. Era tan tierno.
-          Gracias –sonreí –voy a cambiarme, enseguida vuelvo.
Me di una ducha rápida y me vestí así:

Cuando salí, observé a Harry. Él estaba hablando por teléfono, y por lo que alcancé a oír, era Niall. Se veía extremadamente sexy. En un momento levantó la mirada y me vio. Sonrió y yo le devolví la sonrisa acercándome a él.
-          Te dejo, Nialler. Sí… muy bien, nos vemos allí en un rato. Adiós. –colgó- Wow, estás preciosa. –dijo mirándome de arriba abajo.
-          No digas tonterías –sonreí – ¿Qué te dijo Niall?
-          ¿Qué tonterías? Harry Styles nunca miente, que lo sepas. –me guiñó un ojo –me ha dicho que le avisará a los chicos y nos vemos en el hospital en una hora. ¿Quieres ir a desayunar?
-          Primero: sí mientes. Porque yo no estoy preciosa, estoy normal. –él rió. –Segundo: Tengo mucha hambre, y eso es raro en mi por las mañanas, así que sí, vamos a desayunar. –le di un corto beso en los labios.
-          Tercero –comenzó a decir él -¿eso es todo?
-          ¿Qué más quieres que diga? –dije confusa.
-          Me refiero al beso, ¿fue ese “besito” mi BESO de los buenos días?
-          Estás muy loco. –comenté riendo.
-          Tú me vuelves loco. –se acercó mucho a mi y rozó sus labios con los míos. Yo me sonrojé instantáneamente y sonreí. –Me encantas de todas las formas posibles, pero es que cuando sonríes… -se mordió el labio inferior y emitió un pequeño gruñido. Yo solté otra carcajada.
-          Definitivamente hoy estás más loco que nunca. –acorté la poca distancia que quedaba entre nosotros y comencé un tierno beso, que poco a poco fue pasando de fase. Hasta que nos tuvimos que separar por falta de aire. Lo miré a los ojos con complicidad. Me fui acercando otra vez a él, pero más despacio. Hasta que llegué a la comisura de sus labios.
-          Tenemos que irnos –susurré y me separé rápidamente dejándolo solo, esperando algo. Cosa que me hizo reír.
Narra Niall:
Estaba durmiendo plácidamente, cuando mi teléfono comenzó a sonar. Me levanté rápidamente para que los demás no se despertaran y cogí el pequeño aparato. Era Harry.
-          Tío, son las siete. ¿Qué quieres?
-          Lo siento –dijo él –es importante.
-          A ver, cuéntame.
-          Van a trasladar a Diana a Nueva York mañana.
-          ¿¡Qué!? –exclamé en bajito. -¿Por qué?
-          Porque su madre lo quiere así, según tengo entendido. Avísale a los chicos, nos vemos en el hospital en una hora y media.
-          Muy bien. ¿Y cómo está ______?
-          Aparentemente bien –hizo una pausa - Te dejo, Nialler.
-          ¿Ha llegado ella?
-          Sí… -no sé por qué pero creo que sonreía.
-          De acuerdo. Que te vaya bien. Adiós.
-           Muy bien, nos vemos allí en un rato. Adiós. –colgué.
El sueño se me había ido, así que bajé a la cocina a comer algo, me moría de hambre. Me sorprendí al ver a Louis sentado con un vaso de agua en frente.
-          Lou, ¿Qué haces despierto?
-          No he pegado ojo en toda la noche, pobre Diana…
-          Eh… tengo una noticia –dije nervioso, no sabía qué tal le sentaría esto a él. –Creo que hoy será la última vez que veamos a Diana. Por lo menos en ese estado.
-          ¿Qué pasa? ¿Por qué dices eso?
-          Porque me he enterado de que la van a trasladar a otro sitio…
-          ¿¡Qué!? ¿Por qué? ¿Cuándo? ¿A dónde?
-          Calma, calma… se la llevan porque su madre quiere eso. Mañana y a Nueva York.
-          Dios… no pueden quitármela así.
-          Lo siento, Louis. Pero recuerda que la que decide es su madre, no nosotros.
-          Bueno, entonces ¿Qué esperamos? Vamos a verla.
-          Hemos quedado con Harry dentro de hora y media en el hospital. Más tarde le avisamos a los demás, es muy temprano.
-          Está bien. –Louis se levantó y fue escaleras arriba, me imagino que a su cuarto. Yo me quedé preparándome el desayuno. Y pensando, como siempre en… mi amor secreto.
Narra Diana
Por mucho que la gente diga lo contrario, no sabemos lo que tenemos hasta que lo perdemos. Y yo lo perdí. Perdí el control de vivir, ahora estoy en una cama. Mi cuerpo está dormido, pero mi mente está en una lucha contra la vida y la muerte. Pendo de un diminuto hilo y si este se rompe, entonces yo caigo y… fin. Puedo observar como enfermeras vienen cada hora a mi habitación, hacen algunos apuntes, me acomodan el suero y se van. Siempre lo mismo. A veces viene un médico. Me cae muy bien, siempre me está hablando y dice que debo luchar porque hay mucha gente en el mundo que me quiere y me necesita. Luego apaga la luz de mi habitación y se va. Es en esos momentos cuando necesito que alguien esté conmigo, a mi lado. Recuerdo cuando era pequeña y me daba miedo la oscuridad, mi hermana siempre estaba dispuesta a dejarme dormir en su cama cuando tenía pesadillas. Ahora más que nada la necesito, necesito que me ayude a escapar de esta pesadilla.
Recuerdo con claridad el accidente del avión. Nunca me imaginé que esto podría ocurrir. Yo estaba hablando con una pequeña cuando de repente empezaron a producirse turbulencias. La niña me cogió la mano, estaba asustada, yo también, pero no iba a demostrárselo. Las turbulencias aumentaron y el piloto anunció que realizarían un aterrizaje forzoso. Pero salió mal. Me gustaría saber cómo está toda la gente que iba en el avión conmigo, quisiera saber cómo se encuentra la pequeña que se sentaba a mi lado. No puedo imaginármela en un estado semejante al mío. Por dios, éramos gente joven. Teníamos toda la vida por delante. No entiendo como esto puede ocurrir así. Quisiera tener a alguien que me escuchara en este momento y que supiera explicarme el por qué de estas tragedias. Hay gente que no se merece nada de esto. Y ahora que lo pienso, yo quiero luchar por mi vida. Quiero crecer, formar una familia, vivir, eso es: quiero vivir, y lo conseguiré.
Narra ______:
Harry y yo habíamos ido a un Starbucks a desayunar. Luego nos dirigimos al hospital y allí nos encontramos con los chicos, Daniela y María. Nos saludamos todos, yo le mandé una mirada cómplice a Louis.
-          Voy a hablar con Louis. –le susurré a Harry.
-          De acuerdo, aquí te espero. –me dijo. Me acerqué a Louis y le toqué el hombro.
-          ¿Podemos hablar? –dije sonriéndole.
-          Claro, vamos a la cafetería. –llegamos y nos sentamos.
-          No quiero que estés mal por esto. Ella estará mejor en Nueva York, ya lo verás.
-          Lo sé, pero la echaré de menos. Diana era especial.
-          Pronto la volveremos a ver, te lo prometo.
-          Gracias ______. He tenido mucha suerte por conocerte, eres una gran amiga.
-          Eso es porque aprendí de ti. ¿Vamos con los demás?
-          Me quedaré aquí un rato más. Necesito pensar…
-          De acuerdo, si necesitas cualquier cosa avísame ¿vale?
-          Si –me sonrió y me fui otra vez con los chicos.
Cuando llegué todos estaban sentados, menos Daniela. Desde que la vi me pareció que estaba algo nerviosa.
-          ¿Te pasa algo? –pregunté.
-          Eh… no, nada. ¿Por?
-          Vamos, Daniela. Te conozco lo suficiente como para saber que no estás bien. Cuéntame.
-          Es que… es complicado. No quiero que te enfades conmigo.
-          Nunca lo haría, por favor, confía en mí.
-          Está bien. Bueno… el caso es que… me han ofrecido un contrato en Milán para trabajar como modelo.
-          ¡Eso es genial! ¿Por qué creías que me iba a enfadar?
-          Porque… me marcho en dos días… -ella estaba algo ¿asustada?
-          ¿Qué? –vale, la noticia me había tomado por sorpresa y en este preciso momento no me convenía que se fuese una de mis mejores amigas. Pero traté de sonar lo más normal posible para que no se diera cuenta. –No… no sabes cuánto me alegro por ti.
-          ¡Gracias! Eres una gran amiga. Te quiero, gracias por entenderme. Créeme que de verdad me hubiera encantado permanecer aquí contigo en este momento…
-          Tranquila –tomé sus manos –esta es una gran oportunidad que quizás no se te vuelva a presentar y… y yo quiero que cumplas tu sueño. –en ese momento me acordé del día en que nos conocimos y sonreí inconscientemente.
Flashback
Al salir a la calle, el frío golpeo mi rostro. Era bastante notable la diferencia de temperatura, pero no me disponía a pasar mis vacaciones, encerrada en un apartamento. Metí mis manos en los bolsillos del abrigo porque olvidé ponerme guantes. Caminé y caminé hasta entrar en un centro comercial. Sí, los centros comerciales eran mi debilidad, por alguna extraña razón me atraían. Además, dentro hacía menos frío. Una vez en el centro comercial, me fijé que había demasiada gente para ser un día de entre semana y además las 9 de la mañana.
Me acerqué a la multitud y pude divisar una especie de pasarela repleta de chicas, todas eran muy hermosas y bastante altas. Entonces me fijé en una de las muchachas, ella estaba en una esquina lejos de la pasarela y por lo que pude observar, estaba llorando. Sin pensarlo dos veces me acerqué hasta ella, que alzó su vista para observarme y pude confirmar que estaba llorando. A pesar de eso, la chica era muy bonita. Además de ser alta, su cabellera era larga de un color castaño oscuro llena de hermosas ondas. Era de tez morena y ojos celestes como el cielo. Verdaderamente esta chica era preciosa. No entendía por qué lloraba.
-          ¿qué te ocurre? –pregunté al ver que seguía llorando desconsoladamente.
-          …–no dijo nada, simplemente se secó las lágrimas.
-          Puedes contármelo. Tal vez te sientas mejor. –insistí.
-          La gente aquí es racista y discriminatoria. Sobretodo ellos. –señaló a un grupo de personas que se encontraba en frente del grupo de chicas.
-          ¿Pero que te han hecho?
-          No me han dejado presentarme al casting para ser parte de las modelos que exhibirán la nueva tendencia de Olga Martí por el hecho de que no soy de aquí.
-          No deberías sentirte así por eso. Ellos se lo pierden porque tú eres una chica preciosa, y ¿sabes una cosa? Cuando salgas en portadas de revistas mostrando otra colección de otro diseñador, ellos se retorcerán de la envidia y querrán contratarte y tú les pagarás con la misma moneda.
-          ¡Vaya! Eres vengativa.
-          Tengo una hermana. –dije sonriendo.
-          Me llamo Daniela, ¿y tú eres…?
-          Yo soy _______, vivo en (tp).
-          ¿quieres venir a tomar un café?
-          La verdad me alegra que me lo digas, no he conocido mucha gente por aquí.
-          Yo tampoco. Llegué ayer a Londres y eres la primera chica “normal” que conozco.
-          ¿chica normal?
-          Si… la única chica que no es modelo. O eso espero.
-          ¡Ah! Puedes estar tranquila –dije riendo. –no soy, ni seré modelo.
Fin del flashback
-          ¿Qué pasa? –preguntó al notar mi sonrisa. -¿______?
-          Cuando salgas en portadas de revistas mostrando otra colección de otro diseñador, ellos se retorcerán de la envidia y querrán contratarte y tú les pagarás con la misma moneda. –dije repitiendo lo mismo que aquel día.
-          Eres genial, nunca te olvidaré.
-          No, no digas eso. Todavía no es momento de despedirse.
-          Tienes razón, pero te lo digo de todas formas. –sonrió y nos abrazamos.
Después de un rato, vi que el médico que atendía a Diana salía de su habitación y nos dio permiso para entrar a verla. Así que me adentré en el pequeño cuadrilátero y observé a mi hermana durmiendo en aquella camilla. Era la primera vez que la veía así… en estado de coma. Me acerqué lentamente y tomé su débil mano.
-          No sabes lo mucho que te voy a extrañar… nunca en la vida habíamos estado tan cerca y a la vez tan lejos. –hice una breve pausa. –Me haces mucha falta ¿sabes? Hay muchas cosas que tengo que contarte, y aunque quizás no me oigas, te las contaré igual. Louis te quiere, y mucho. Te prometo que si despiertas, no me interpondré entre vosotros. Daniela me ha dicho que se irá a Milán, le han ofrecido un contrato. Esa chica es genial, seguro que triunfará. Y… bueno, tengo que contarte algo muy importante para mí. Harry y yo… estamos saliendo. Me he dado cuenta de que él me hace feliz y lo quiero mucho. ¡Dios! no sabes lo que daría porque estuvieras aquí conmigo… pero si ese viaje a Nueva York hace que te estés mejor, entonces debo dejarte ir. Aunque no sin antes prometerte que pase lo que pase, siempre estaré contigo. No me importa la distancia. Recuerda, tú y yo estaremos siempre unidas. Te quiero, hermanita. –me despedí dándole un beso en la mejilla y me fui de la habitación derramando alguna lágrima.
Divisé a Harry, estaba sentado hablando con Louis. Me acerqué a ellos y le dije a Lou que podía entrar a despedirse de mi hermana. Él, encantado, accedió. Y yo me quedé con Harry.
Narra Louis:
______ me dijo que pasara a ver a Diana. Así que me levanté de la silla y pasé al cuarto. No pude evitar soltar una lágrima cuando la vi. Allí estaba, tumbada en una cama, inmóvil… me acerqué y le di un beso en la comisura de los labios.
-          Te echo de menos. Y nunca pensé que diría esto, tal vez suene mal por nuestra considerable diferencia de edad, pero me he enamorado de ti. Y he sido tan estúpido que me he dado cuenta muy tarde. No sabes cuánto lo lamento. –tomé su mano –Te juro por Dios que saldrás de esta, aunque me cueste la vida. Tú tienes derecho a vivir y no es justo que estés así. Te prometo que siempre que pueda iré a visitarte y… no te olvides de mí. Te quiero. –le di un último beso y me fui.
Permanecí sentado en una silla con ______ hasta que todos terminaron de despedirse de Diana. Ya era tarde y teníamos que marcharnos del hospital, pero ______ se negaba. Ella quería pasar la última noche con su hermana.  Yo la entendía perfectamente y me ofrecí voluntario para quedarme con ella. Harry también quería hacerlo, no entendía por qué tanta pegajosidad entre ellos. Pero me dio igual, en aquel momento solo quería estar con mi pequeña Diana. Hubo una pequeña discusión hasta que por fin Harry cedió y se marchó a casa con los chicos. ______ nos fuimos a la cafetería y nos quedamos un rato hablando.
Narra Daniela:
Me sentí bastante bien cuando ______ me apoyó al saber lo de mi viaje. La verdad, me entristecía un poco dejarla sola con lo de Diana, pero no podía desaprovechar la oportunidad. Estuve hablando con Liam, era un chico genial. Nunca lo había visto como más que un amigo, pero no sé… descubrimos que teníamos mucho en común y ahora creo que podría ser algo más que eso. Nos íbamos a ir, pero tenía ganas de ir al baño y le pedí a los chicos que me esperasen, pero creo que nadie me oyó salvo Liam, que estaba en la puerta de fuera esperándome.
-          ¿Qué haces aquí? ¿Y los demás?
-          Eh… tenía ganas de ir al baño… ¿no les has dicho que esperen?
-          Sí, pero creo que ninguno me oyó, ¿Crees que se olviden de nosotros?
-          Serían muy maleducados si lo hiciesen.
-          Liam –dije mirando hacia la nada. –creo que lo son. ¡Nos han dejado aquí!
-          Bueno, no pasa nada. Pediremos un taxi.
Nos fuimos en taxi a mi casa y me despedí de Liam, para quedar al día siguiente con él. 


Bueno chicas, he aquí el capítulo que os prometí ayer. Decidí exprimirme el cerebro y escribir para subirlo hoy jajaja la semana que viene otro!!! espero que os guste mucho mucho y quizás no me pase por aquí hasta el sabado de la siguiente semana porque tengo ya bastantes exámenes que preparar :S por favor, COMENTAD, hacerlo por dios, o si no moriré. jajajaja vale, no moriré pero vosotr@s si lo haréis si no me comentais los capítulos. Y si os da la vara comentar, votais y ya está. Hay opciones para cada quien xd bueno, chauss ^^ PDT: por cierto, descubrí (para que veáis lo anticuada que soy jajaja)  la página esta para hacer conjuntos de ropa (estoy viciada) y ahora me dio por poner la ropa de la rayis jajaja no me acuerdo el link, ya os lo pondré 

5 comentarios:

  1. Dani!!1 Me encatantaa!!!, pobre Diana, Louis :( espero qe se ponga mejor!!!
    Suerte en los examanes
    besos

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    1. Me alegra mucho que te encante :D sip :( ya veremos que pasa en el próximo... Graaacias mil ^^ besos

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  2. He llorado cob este capítulo

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  3. Me has echo llorar:( es muy bonitoo:) Escribes muy bien, nose de donde sacas esa inspiración...Bueno, que me encanta esta novee:3 Besoos:) -Paula

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